Las hormigas se guían por sus huellas para regresar al hormiguero

Las hormigas se guían por una señalización basada en el ángulo de inclinación de la horquilla de su huella para regresar al hormiguero, según un estudio de la Universidad de Sheffield (Reino Unido) que esta semana publica la revista «Nature».

Según los expertos, las hormigas rastreadoras usan un simple sistema de señalización para llegar a casa: el rastro de feromonas que dejan en su caminar siempre tiene el mismo ángulo de inclinación entre las huellas, mostrando siempre a una hormiga que llega a una bifurcación cuál es el camino de regreso y cuál lleva a terreno desconocido.

Los rastros dejados por las hormigas faraonas («Momorium pharaonis») siempre se realizan de tal manera que las dos horquillas que forman su huella se separen con un ángulo de 53 grados, explican los científicos. Esto significa que una hormiga que llega a un cruce de caminos cuando se encuentra lejos del hormiguero podrá encontrar los rastros del mismo ángulo dejados por su actual cabecilla.

Según los investigadores, una hormiga que se encuentra de camino a casa encontrará un ángulo amplio y uno intenso, una diferencia que permite a la hormiga elegir el camino correcto de regreso. Las hormigas situadas por los científicos en rastros artificiales con diferentes ángulos se mostraban frecuentemente confusas.

El descubrimiento responde a la debatida cuestión de cómo las hormigas incorporan información direccional en sus rastros de feromonas sin recurrir a complejos gradientes de sustancias químicas.