
El hormiguero es de acrílico, con un depósito de agua y una caja de forrajeo incorporados. La reina venía en un tubo junto con varias obreras, no fui capaz de contarlas ahí, pero serían unas 20 como mucho. Ya sabía que lo más prudente era dejarlas ahí, pero bien sea por la emoción o por mi mal pulso, al primer intento de introducir una gotita de líquido azucarado en el tubo casi se me escapan. El hecho de tener varias obreras ya muertas tampoco me gustaba mucho. Así pues, decidí poner el tubo dentro de la caja de forrajeo. Supongo que podía haberlo conectado a una entrada lateral, pero tras mi primera pifia

El caso es que los dos primeros dos días no hubo más que un par de hormigas atrevidas que salieron a explorar. Las demás se quedaron con la reina y sacaron la basura y los cuerpos de sus compañeras muertas. Inicialmente lo dejaron todo en la boca del tubo, luego, decidieron que el agujero de entrada al hormiguero que estaba justo al lado resultaba un lugar muy conveniente para tirar todos los desperdicios

El tercer día ocurrió el primer incidente. La reina, a la que le falta una de las patas traseras, se cayó en la entrada del hormiguero y se quedó allí pataleando patas arriba. Pude observar, no sin cierta decepción, que las obreras seguían tranquilamente dentro del tubo, ignorando olímpicamente la humillante situación en la que se encontraba su reina

En los días siguientes pude comprobar que recogieron 3 ó 4 semillas, de vez en cuando iban a beber y también llegaron a probar el aguamiel que les puse en un algodoncito. Despejaron de basura la entrada (la trasladaron a la primera cámara del hormiguero), y poco más. Pude finalmente contarlas, tras las bajas sufridas eran 17 obreras más la reina, y un huevo. Tras una semana, iba a irme de vacaciones, pero al fin y al cabo, parecían estar bien instaladas. Tenían agua, comida, el depósito de humedad estaba lleno, se las veía pasear por la zona de forrajeo, aunque la mayoría estaban apiñotadas en torno a la reina.
Como digo, me fui de vacaciones y no volví a ver el hormiguero hasta pasada otra semana. Entonces comencé a preocuparme. Parecían haber consumido las 3 semillas que habían recogido (estaban las cascarillas en el basurero), pero no habían recogido nuevas semillas. Bueno, quizá no les hacían falta, así que las dejé tranquilas. Me voy otra semana y a la vuelta me encuentro dos obreras muertas y una tercera que parece estar moribunda (está de lado y mueve las patas de modo errático). Los individuos muertos está ahí donde han caído, y aunque la mayoría de los desperdicios están en la primera cámara (no en el exterior), hay también restos dispersos por las otras salas, incluida la que ocupa la reina.
Quiero pensar que me puede la ansiedad del novato, pero según todo lo que he leído hasta ahora, me da que se me van a morir de estrés (¿demasiado espacio?). No es que pueda hacer gran cosa, ya que sacarlas de ahí resultaría muy difícil, sería aún más estresante para ellas, y de todos modos, tampoco tengo claro que sirviera de nada

Alguien ha pasado por lo mismo y tiene algún consejo? La zona del hormiguero está tapada, y más tranquilas no han podido estar ya que se han quedado solas en la casa. Hay algún modo "quitarles el miedo" y animarlas a que salgan a forrajear?
En fin, no quería comenzar con un tochopost como segundo mensaje, pero estoy preocupado por mis hormigas

Saludos
PD: en el tiempo que he escrito esto, una cuarta obrera se ha quedado de lado y pataleando erráticamente. El resto siguen apiñotadas con la reina y apenas se mueven, pero en toda la montonera diría que hay más individuos en posturas "extrañas"