Disculpad las faltas ortográficas y los errores de tipeo.
Constrcutores de "rascacielos"
Las castas de los termes: reproductores, obreros soldados
El trasporte e instalación de los huevos
Los cuidados y la alimentación de las larvas
Observados superficialmente, los rasgos de semejanza existente entre hormigas y los Isópteros o termes son tan numerosos que llegaron a engañar a los científicos de otro tiempo, los cuales no disponían de las tecnologías actuales ni de los criterios taxonómicos precisos que secundan la labor de los zoólogos modernos.
En efecto, tanto las hormigas como los termes presentan un comportamientos social muy complejo, clasificado como de tipo eusocial o de nivel superior, y viven reunidos en colonias a veces numerosísimas, entre cuyos individuos se asiste una subdivisión más o menos drástica, pero siempre armoniosa, de las tareas inherentes a las diversas necesidades del grupo. En ambos casos, además la comunidad vive en el interior de voluminosos y cómodos nidos contruidos por sus mismos componentes, y cuyas dimensiones y complejidad arquitectónica reflejan de una manera bastante precisa el grado de evolución alcanzado por la especie en cuestión. Siguiendo con la descripción de las afinidades, o cuando menos de los puntos de contacto existentes entre las hormigas y los termes, no podremos por menos de observar que, tanto una parte como la otra, se perfila por la ordenación jerárquica precisa en castas especializadas, que en el caso concreto que nos ocupa no presupone ningún tipo de supeditación entre los individuos pertenecientes a castas diferentes, en cuya base se encuentra, en el caso de las hormigas, una hembra, la reina que tras ser fecundada una única vez, pasa a ser la única productora de huevos, mientras que en los termes la continuidad de la colonia queda garantizada por la perpetua actividad sexual de una pareja sexualmente madura, la llamada "pareja real", que se encuentra relegada en el interior de una espaciosa cámara subterránea.
Alrededor de los reproductores gravita un número de individuos muy elevado, que en los casos más extremos puede llegar a los 2-3 millones de unidades, sexuados al mismo tiempo estériles, debido a la drástica atrofia de sus gónadas (sólo las hembras en las hormigas, tanto machos como hembras en las termes), a los que se exigen tareas más diversasy al mismo tiempo humildes, puesto que están dedicados, según su especialización, a la actividad de simples servidores, de contructores, de barrendero, de suministradores de alimento, de criadores de la prole o de esforzados defensores de la comunidad.
Pese a toda la serie de semejanzas formales expuestas hasta aquí, en la actualidad se reconoce universalmente que los Isópteros están bastante alejados, tanto desde un pusto de vista filogenético como desde un punto de vista simplemente taxonómico, del orden de los Himenópteros, dentro de cuyo ámbito se encuentran incluidas las hormigas. En realidad, parece que en el curso de la historia de su evolución -de la que tenemos testimonios fósiles que se remontan al Oligoceno, Mioceno y Eoceno- los termes observaron un sistema organizativo y un comportamiento muy parecidos a los que se observan entre las hormigas, aunque alcanzando el objetivo propuesto de manera totalmente indepentiente. Se trata pues de un caso de convergencia evolutiva que se ha determinado que, en el intento de colonizar los mismos ambientes, organismos pertenecientes a órdenes y clases muy diversos adoptaran las soluciones análogas para resolver los mismo problemas, presentando de hecho un aspecto general y un tipo de comportamiento muy similares. Para darse cuenta más exacta de ello bastará observar qué y cuántas afinidades estructurales y comportamentales pueden comprobarse entre los Cetáceos por una parte y los grandes peces pelágicos por otra o entre un mamíferos insectívoro y un insecto excavador como es el topo común y el extraño ortóptero hipogeo que responde al nombre común de alacrán cebollero.
Mediante un examen más adentro y detallado, cabrá la posiblidad de distinguir fácilmente termes y hormigas de acuerdo con unas simples características relativas a la morfología exterior: dejando aparte la despigmentación casi total de los tegumentos, que proporciona a los termes aquella coloración blanquecina o amarillenta, hay que destacar cuando menos en las castas inferiores, la ausencia total de ojos, muy desarrollados en cambio en las hormigas, la porción torácica del cuerpo de estas últimas además está regularmente separada de la abdomianl, como en todos los Himenópteros, por una especie de estrangulacióna la que se da el nombre de pecíolo. Por otra parte, las hormigas son consideradas insectos superiores y su desarrollo sigue los cánones clásicos de la metamorfosis completa u holometabolia, en virtud de la cual se llega al estadio adulto a través de numerosos estadios muy diferentes entre sí en cuanto a morfología y fisiología, mientras que los Isópteros presentan en este aspecto un comportamiento más primitivo y no llegan a la condición adulta más que a través de toda una serie de pasos graduales , de tipo claramente hemimetábolo, en cuya base se encuentra una pequeña larva, llamada en este caso neánido que, aparte de unas dimensiones menores, posee ya muchos rasgos propios del imago (adulto).
Desde un punto de vista estrictamente taxonómico, como resultado de diversas afinidades tanto morfo-anatómicas como fisiológicas, los Isópteros están relacionados con los Blatoideos (cucarachas, baratas, etc). Las semejanzas que existen ente los dos grupos quedan puesta de relieve de manera muy clara en la estructura primitiva del aparato volador y en la distribución homóloga de las venas alares, en la conformación de los segmentos abdominales y anatomía y fisiología del aparato reproductor, pero de manera particular en los complicados mecanismos digestivos propios de los Isópteros y ciertas cucarachas xilófagas primitivas.
Extracto de "Los Animales: gran enciclopedia ilustrada" Nº 133 de la Editorial Delta S.A.