Tengo las colonias de Camponotus barbaricus y Messor barbarus desde hace muy poco, con reducido número de nurses/obreras, y con alguna que otra baja (transporte, inexperiencia, etc.) desde que las tengo. Teniendo en cuenta la precariedad en la que se encuentra la reina en la fundación de su colonia (con poca ayuda, con energías de puesta consumidas, etc.), creo que es importante acelerar en ese momento el desarrollo de nuevas obreras que levanten la colonia. Y esto, en pleno invierno, pasa por ponerles calefacción y evitar, así, su hibernación.
Participando en otros temas, he explicado mi experiencia con tortugas que hibernan (como las tortugas rusas). Lo mejor es dejarlas hibernar, pero es necesario mantenerlas activas con calefacción artificial cuando están débiles: acabadas de nacer, enfermedad, desnutrición, etc., pues la hibernación siempre implica riesgos de salud e incluso riesgo de muerte para los ejemplares que no están fuertes.
Aunque no tengo experiencia con hormigas, en todo momento he considerado que en el caso de las hormigas también puede ser muy sensato favorecer la actividad de puesta y crecimiento rápido de la colonia en las colonias iniciales constituídas por la reina y por pocas obreras. Es por eso que decidí ponerles una manta térmica.
Inicialmente les puse la manta térmica bajo los hormigueros acrílicos, pero como que los hormigueros que tengo son de seta, de manera casi immediata se producía condensación de agua en el interior de los hormigueros a través de las setas. Es por eso que decidí poner la manta térmica por encima.
Para aislar la parte superior y que el calor no se disipara en la habitación (con el riesgo que el calor no llegase a los hormigueros), le puse una lámina de goma EVA por encima (el conjunto hacía las veces de tapa oscura sobre el hormiguero). Sin embargo, me dió un poco de miedo que la manta térmica calentase demasiado a las hormigas, así que también le puse una lámina de goma EVA entre la manta y el hormiguero. El resultado no fue del todo satisfactorio porque la goma EVA inferior aislaba demasiado del calor. Finalmente decidí hacerle unos agujeros a la goma EVA inferior, de manera que me aseguraba que llegase el calor al hormiguero pero no lo hiciera de manera uniforme, permitiendo un cierto gradiente al que las hormigas podrían acomodarse. El resultado lo podéis observar en las siguientes fotografías:
Manta térmica dispuesta sobre los hormigueros, con la goma EVA por encima fijada con unos clips:
Manta térmica levantada que permite ver los hormigueros y la lámina EVA inferior agujereada, todo el conjunto unido por 4 clips:
Sin generalizarlo a cualquier tamaño y edad de colonia, sí que defiendo poner una manta térmica en las colonias incipientes. El resultado lo tenéis en las siguientes fotografías a pocos días de tener las hormigas.
Camponotus barbaricus con larvas y pupas:
Messor barbarus con larvas: