Ayer casi las mato. Saqué el tubo del cajón para ponerles jarabe. Pinché en el algodón, presioné ligeramente el émbolo y... me dio un gesto involuntario y salió un chorro que atrapó a las 3 pequeñajas. No llegó hasta Triss por muy poco. Rápidamente volví a extraer todo el líquido con la jeringuilla y las dejé en el cajón para no estresarlas aun más.
25-5-2019
Siguen todas vivas, menos mal. Ya no me atrevo a inyectar nada en el tubo, no me fío un pelo, así que he puesto el tubo en un bote de chucherías que guardaba para hacer su zona de forrajeo en un futuro. Las he destaponado y observado bien el algodón, que estaba limpio, y les he dejado unas gotitas de jarabe, un algodón con la mezcla de jarabe+agua+miel y una gambita. El algodón no lo tocan, el jarabe les gusta mucho y hay una hormiga que lleva media hora paseándose por dentro de la gamba. Espero que el estrés de ayer no les pase factura.
Aquí podéis ver cómo van a vivir durante los próximos meses.
Son muy, muy pequeñas, así que como ventilación he hecho un agujero en la tapa y pegado un filtro de cafetera italiana. Valen menos de un euro y sus agujeros son más finos que un alfiler
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