Compañeros, ¡las primeras reinas de Pheidole que encontré ya tienen nurses!
Si no me equivoco fue el 29 de mayo, y hoy 24 de junio han nacido varias de distintas reinas.

Una de las pocas fotos que he podido hacer a las recién nacidas Pheidoles.


También empiezan a despertar algunas Tetramorium. Esto va a ponerse intenso.

Las Messor no paran. Las larvas y pupas ocupan más cámaras aún, y la colonia está más voraz que nunca. Así a ojo de buen cubero, sumando cámaras y haciendo una media, cuento más de 1500 obreras. (Entenderéis el miedo que me da que perforen las conexiones y se fuguen )
La ampliación que puse esta primavera no va a ser suficiente a final de verano, y ahí habrá que tirar de ingenio o restringir a la fuerza el crecimiento, porque la estantería no da para más y no sé si será muy práctico tirar un tubo hasta la de al lado (y de aquí a poco irme de mi casa y cedérsela a ellas).

Os dejó unas fotos de hoy.


¡Salud!

Os cuento.

Tenía una Camponotus barbaricus con unas pocas obreras que fueron muriendo, salvo una, hace un par de meses. La colonia iba a medio gas y me temía su fin definitivo, aunque la reina se ve sanota y pone huevos sin problemas. Por otra parte, tenía una colonia medianamente avanzada de Camponotus sylvaticus (más de 70 obreras y soldados imponentes) cuya reina apareció muerta hace algo más de una semana. Podéis imaginar mi cara al encontrármela. Total, dos colonias truncadas de Camponotus: barbaricus y sylvaticus. Por la segunda poco podía hacer; por la primera... Decidí tratar de darle un empujón con la prole (no obreras) que había dejado la sylvaticus. La primera reacción fue bastante arisca, pero acabó aceptando. Hoy, la reina de barbaricus cuenta con su única obrera superviviente, su propia prole y prole y varias obreras (grandotas) de Camponotus sylvaticus, que la han dado por buena. Además, parece que la nueva compañía la ha animado a poner otra tanda de huevos. De seguir el buen rumbo, será gracioso ver a la reina primeriza, que aún sacaba obreras pequeñitas, con soldados de sylvaticus, que no tardarán en salir.

Hace dos días os decía que estaba deseando que las cruentatus sacaran obreras grandes o soldados ¡y parece que me oyeron!





La foto desde luego no es la mejor, pero bueno: la grandota es la reina; a su derecha, las dos recién nacidas. Son las primeras que tienen claramente marcado el tono rojizo, y un tamaño ya considerable, nada que ver con sus hermanas.

Hoy tengo más novedades: las Myrmica han sacado alados
Hay cuatro o cinco machos y varias pupas de hembras.


Me ha sorprendido un poco porque, como veis, la colonia no es especialmente grande, aunque tienen mucha prole (creo que hay más prole que obreras).
Parece que el verano les está viniendo bien a todas.

Os dejo un vídeo del estado actual de la colonia de Messor barbarus. El módulo pequeño (30x20) lo habilité hace poco, y mirad cómo está. Estas fieras no cabrán ahí al acabar este verano. Estoy pensando en conectar, llegado el momento, un módulo vertical apoyado en la pared para seguir aprovechando el espacio sin tirar tubos de aquí allá por las estanterías. De ese modo creo que podría poner dos más sin complicaciones, aunque ya veremos.

Perdonad la calidad del video, he tenido que comprimirlo para poder subirlo al foro.

Lo que se ve en el vídeo anterior es resultado de meriendas como ésta:

La revolución llega a las colonias (y un poco de locura).

Las colonias de Aphaenogaster gibbosa y Myrmica sabuleti están sacando muchos machos, y ésta segunda tiene pupas de hembras también. Además, parece que las Messor barbarus no querían ser menos y también tienen pupas de alados.

Va a empezar la fiesta de alados en casa

Las Camponotus cruentatus han sufrido un bajón. Cuento quince fallecidas. La colonia se mantiene porque habían nacido bastantes. He quitado, limpiado completamente y vuelto a poner el forrajeo, porque observé algo raro...salían debilitadas y medio atentados afuera hasta que morían, y me olía mal. He cambiado ligeramente la alimentación por si pudiera influir. Ahora están en observación. Las que hay dentro del hormiguero no presentan síntomas visibles. A ver qué pasa.

Por otra parte...las Lasius que capturé a principios de temporada ya tienen sus primeras nurses. Algunas fueron muy generosas y tenían en torno a veinticinco capullos.




Ojalá salgan fuertes y pueda formar una buena colonia a partir de estas reinas.

Hoy he podido hacer una foto a una pupa de princesa, aunque una cabezona anaranjada la protege con su vida y no hay forma de que se separe.


La colonia crece a un ritmo pasmoso. He aprovechado un sorteo que gané con productos de Anthouse para hacerme con otro módulo y ampliar más pronto que tarde. El segundo módulo, que lo añadí en primavera, ya está lleno. Este tercero voy a ponerlo prácticamente en vertical, aprovechando el fondo de la estantería. Ya os contaré cómo queda.

Bien, anoche añadí el tercer módulo, aunque finalmente no ha podido ser en vertical: las hormigas no agarraban bien y eso parecía un tobogán suicida, así que opté por tirar un tubo (después de pelearme un rato con los diámetros y las entradas) al nivel superior para colocarlo en su posición natural. Ahora tienen un parque de atracciones por donde pasear (con suerte despejan un poco el forrajeo).


Módulo 1, 40x20 con seta:

Módulo 2, 30x20 con esponja:

Módulo 3 (recién puesto), 30x20 con esponja:

Las tres piezas y el forrajeo están unidas con un conector cuádruple.



Creo que al ritmo que van, a final de verano ocupan el nuevo módulo entero. Hay algunos cientos de larvas y princesas a punto de nacer. Veremos qué pasa.

Compañeros, las Messor han decidido producir princesas al por mayor. Cuento más de veinte pupas, y otro montón de larvas que intuyo, por su tamaño, que también lo son. Las mayors las protegen sin descanso. Os dejo algunas fotos que he hecho rápidamente:





En esta última podéis a la reina, y una pupa de hembra debajo de ella. También larvas grandotas que pronto serán pupas de hembras:

Hay más y más pupas de aladas. Estoy preparando un segundo forrajeo, también con una caja grande de Ikea, que iría conectada a un tubo largo, con la idea de que este forrajeo pueda moverse hasta la ventana y facilitar un posible vuelo llegado el momento. Tanto quitamos a la naturaleza que sería bueno al menos pensar que alguna de las princesas nacidas en mi hormiguero forma su colonia en libertad.